Escribirle al Desconocido Más Cercano: Tú Mismo

Escribirle al Desconocido Más Cercano: Tú Mismo
Photo by Andrew Neel / Unsplash

Hoy quiero compartir una idea que leí de Austin Kleon y me gustó mucho:

And if you can’t think of anybody to write to, you can write to the stranger you’re closest to: Yourself. In the past, in the present, or in the future.

Austin Kleon

Construí este espacio con la intención de compartir lo que me parezca interesante. Pensé que iba a ser fácil ya que hay un chingo de cosas que encuentro interesantes. Pero no lo está siendo. Y eso que esta apenas es la tercera publicación.

Hoy me estaba rompiendo la cabeza pensando sobre qué escribir y a quién me quería dirigir. Sentía que mis palabras solo iban a tener valor si alguien más las leía.

Después de leer la frase de Austin, pensé: "No necesitas que nadie más lea lo que escribes para que tenga valor. Tú mismo puedes ser tu audiencia. Ya sea tu yo del pasado, tu yo de ahora o el de algún futuro lejano."

Escribirle a mi Yo del Pasado

Por más que queramos, no podemos regresar el tiempo y cambiar las cosas que ya pasaron. Aunque creo que la escritura es lo que más se acerca a eso.

Escribir pensando en tu yo del pasado puede ser como hablar con un viejo amigo.

Es una oportunidad para decirle: "Hiciste lo mejor que pudiste con lo que tenías. Tomaste decisiones que creías que nos iban a hacer bien, aunque algunas de esas decisiones nos hayan lastimado."

Puede que aún duelan las cicatrices que dejaron tus decisiones pasadas. Y está bien. Esos "errores" sirvieron como lecciones, y gracias a ellas, hoy tengo más experiencia y soy más fuerte.

Escribirle a mi Yo del Presente

Escribir pensando en tu yo del presente es como ponerte frente al espejo y ser honesto contigo. No hay nadie a quién impresionar. Sin filtros. Como va.

Es una oportunidad para hacerte preguntas importantes como: ¿Qué estás sintiendo? ¿Qué quieres? ¿Qué no quieres? ¿Qué te duele? ¿Qué te anima?

Escribirle a tu yo de hoy es decirte: "Estoy aquí, te escucho. No tienes que ser perfecto, solo real."

La mayoría de las veces, escribir te ayuda a aclarar el desmadre que traes en la cabeza. La escritura puede ayudarte a que ese caos mental se convierta en aprendizajes que tal vez ni siquiera estabas buscando.

Escribirle a mi Yo del Futuro

¿Y si le escribo a mi yo del futuro?

Le puedes contar cómo son las cosas ahora: lo que estás tratando de conseguir, lo que quieres olvidar, lo que te gustaría recordar, tus miedos y tus sueños.

Escribirle a tu yo del futuro es una forma de visualizar a dónde quieres llegar. Tal vez en unos años te leas y te rías, te sorprendas, o te sientas orgulloso de ti mismo.

Escribir al futuro es más que un mensaje en el tiempo, es convencerte de que, a pesar de las dificultades, lo vas a seguir intentando.

Y cuando ese futuro llegue y vuelvas a leer esas palabras, no solo te vas a dar cuenta de lo mucho que has cambiado, sino que vas a entender que cada paso que diste, por pequeño que fuera, valió la pena.

La Escritura Como un Café Contigo Mismo

Escribirle a cualquier versión de ti mismo es como si te sentaras a tomar un café contigo.

A veces te va a servir para soltar cosas que aún cargas y te pesan. Otras para recordar buenos momentos, y otras más, para imaginar cómo podrían ser las cosas más adelante.

Al final, la escritura es ese espacio donde puedes ser auténtico, donde no necesitas aparentar nada. De hoy en adelante, mi audiencia será mi yo del pasado, mi yo actual y mi yo del futuro.

Es raro, pero a veces las conversaciones más chingonas son las que tienes contigo mismo.